La mañana charla conmigo, me cuenta muchas de sus incógnitas que nunca voy a terminar de entender. Luego me escucha y siento que:

Aveces adoro tus manos; otras veces me aburren.
Aveces me gusta jugar en tu pelo cuando el viento roza,
otra me es insignificante pensar en que eso tiene sentido.

Los gatos invaden mi cama, siempre estan felices y cómodos durmiendo conmigo,
ronronean me abrazan me miran,
quieren que hable.
Luego duermen y soy feliz viendo como tan inocentemente descansan.

Por otra parte, escribo en versos cuando esto no tiene rumbo. Esa canción que me taladra el cráneo,i gual que en aquel invierno de hace unos años atrás.
Me gusta tanto el invierno, vivo diferente a las otras estaciones. El verano en la ciudad sinceramente me dá mucho miedo y me deprime. El invierno en esta ciudad me dá energía y melancolía. Pero esa canción que está sonando en este momento tiene tu cara dibujada en él.